Ahora que no pueden usar el nombre de Sussex Royal
De momento todo son buenos propósitos, humo. Así que está por ver lo que dará de sí «cuando sea el momento oportuno» la nueva fundación de Enrique de Inglaterra y Meghan Markle, ahora que se han desmarcado de la familia real y están instalados en Los Ángeles; ella buscando su regreso al cine por la puerta grande.
Los duques de Sussex -el título, regalo de la reina Isabel II lo mantienen- anunciaron que pretendían lanzar una nueva fundación, pero la crisis del coronavirus paralizó su actividad. Ahora, algo menos de una semana después de decir adiós a la familia real británica, la pareja ha revelado el nuevo nombre, con guiño incluido a su pequeño Archy, que el mes que viene cumplirá su primer año de vida.
Principio del universo
Archewell es el nuevo nombre de la fundación ya que los duques ya no puden utilizar la denominación Sussex Royal con el que hasta ahora se identificaban, al no ser parte de la realeza y no poder asociar su identidad con el término «real». Según han explicado, el nombre parte del término griego arché, que significa fuente de acción, principio del universo, fuerza motora. Y esa misma palabra, cuentan, fue también la inspiración para el nombre de su hijo, Archie Harrison Mountbatten-Windsor.
«Como para vosotros, para nosotros lo principal es apoyar todos los esfuerzos posibles para enfrentar la pandemia global del covid-19, pero con toda esta información a punto de salir a la luz, nos sentimos obligados a compartir la historia de cómo surgió todo ello», ha contado la pareja para justificar las noticias del lanzamiento de la fundación en un momento tan delicado, según ha avanzado en exclusiva ‘The Daily Telegraf’.
