FICOMIC y el Museu Nacional d’Art de Catalunya (MNAC) organizan la exposición El Víbora.
Comix contracultural, un homenaje a la desaparecida revista, testigo de los inicios de la democracia y de la eclosión del movimiento underground. Con cerca de 100 portadas, 38 obras originales, fotografías y documentación complementaria la muestra celebra los 40 años de la aparición del primer número de la revista, en 1979. La exposición, situada en la sala Temporales 2 del MNAC, está comisariada por Antoni Guiral con la colaboración de Àlex Mitrani, conservador del Museu Nacional. El Víbora. Comix contracultural estará abierta al público del 20 de junio al 29 de septiembre de 2019.
El director del MNAC, Pepe Serra, ha afirmado que «el Museu hace años que ha introducido la cultura popular en el recinto y, como parte de esta cultura, ha expuesto anteriormente originales de Las Meninas de Santiago García y Javier Olivares, Corto Maltés de Juan Díaz Canales y Rubén Pellejero o Ego sum lux cómic de la Escuela Joso». Meritxell Puig, directora de FICOMIC, ha resaltado la buena sintonía que ha habido desde el primer momento con el Museo. Una colaboración que permitirá producir nuevas exposiciones en un futuro muy próximo.
Antoni Guiral ha explicado que la exposición quiere ser un homenaje a una publicación que forma parte de nuestro patrimonio, de nuestra historia. «Una revista en la que destacaban, por encima de todo, sus autores». Una afirmación que compartía Alex Mitrani, remarcando que El Víbora estaba realizada por un gran número de autores, de indiscutible calidad, cada uno con un estilo personal propio y destacado.
El Víbora. Comix contracultural permite descubrir la valía artística de los autores que publicaron sus trabajos, tales como, entre muchos otros, Nazario, Roger, Isa Feu, Marta Guerrero, Laura Pérez Vernetti, Mariscal, Gallardo, Pons, Martí, Carratalá, Montesol, Ceesepe, Max, Calonge, Jaime Martín y Pàmies. La revista El Víbora (1979-2004), editada por Ediciones La Cúpula, encarnó a la perfección el sincretismo cultural que se vivió en Barcelona durante los inicios de la democracia. Sus páginas acogieron una gran parte de los autores que habían iniciado la cultura underground en los años setenta, un fenómeno cultural y artístico especialmente vinculado a la ciudad. A través de revistas, documentos, dibujos originales de cómics y de otras obras, la exposición introduce el comix underground en el contexto internacional y barcelonés, en el que nació la revista. Se exponen cerca de 100 de sus portadas impresas, unas 30 publicaciones y 38 obras originales, como los dibujos de Max e Isa Feu para el histórico número especial sobre el golpe de Estado de 1981 o el original de Nazario para la cubierta del número 1 de la revista.
